"NUNCA VA A HABER EFICIENCIA HASTA QUE LA ENERGÍA NO SE VUELVA A DEFINIR COMO UN BIEN SOCIAL"

Por José Rigane*


Las medidas puestas en marcha por el Plan de Eficiencia Energética, tanto en el ámbito estatal, privado y a nivel doméstico, representan un paso adelante pero no solucionan el problema de fondo del tema energético. Antes que nada, me gustaría dejar clara una situación: creo que la iniciativa del Gobierno nacional en relación al cambio del huso horario y las restricciones, hacer un uso eficiente de la energía, está bien. Es una buena medida.
Sin embargo, vamos a dejar claro que nunca habrá eficiencia con la energía hasta que no se modifique el concepto, hasta que la energía no se vuelva a definir como un bien social. Mientras la energía sea tomada como un commodity, una mercancía, las políticas de eficiencia como las que hace el Gobierno no podrán sostenerse.
Nunca se va a alcanzar a resolver el problema de fondo. Mientras se intente hacer ahorro con los sectores de bajos recursos, que son los que menos consumen y no precisamente con los que más consumen, algo anda mal. Mientras esto sucede por un lado, por el otro existe una libre disponibilidad del oligopolio privado, que le permite que exportar petróleo crudo o y gas sin valor agregado. Algo que está mal, porque casi no tenemos disponibilidad. No se puede ser eficiente e intentar exigirle al que no tiene lo que precisamente ni el gobierno nacional, ni el poder político, están dispuestos a hacer con la energía toda.
La causa de la crisis energética es el modelo implementado. La solución, entonces, es cambiar este modelo energético basado en la propiedad privada y en la segmentación de los servicios públicos.
Mientras la energía siga siendo considerada como en la década del '90 un bien para privatizar, una mercancía, un commodity, y no un valor estratégico, un bien social, un derecho humano, no puede haber planes de eficiencia serios y ciertos.
"A diferencia del dueño que pasó fin de año a oscuras, las compañías piensan que no es rentable ni racional invertir para sostener un sistema eléctrico preparado para esos días de extremas máximas y mínimas temperaturas, cuando la demanda alcanza records.
Esa decisión tiene una lógica contundente desde el punto de vista de la tasa de retorno de una inversión en el ámbito del sector privado. Por caso, no es rentable destinar unos 100 millones de dólares en capacidad de transporte (cables) y estaciones transformadoras, monto estimado por especialistas del sector, para atender el requerimiento de una demanda excepcional por unos pocos días al año. Por ese motivo, en esas jornadas agobiantes hacen cortes rotativos, estrategia que desmentirán con vehemencia porque si no serían multados y hasta los ejecutivos de las empresas correrían el riesgo de afrontar denuncias en la Justicia.
Los cortes de estos días no fueron por imprevisión, sino por un esquema de negocios que tal como está definido no obliga ni alienta a realizar las inversiones necesarias para evitarlos. Por cierto, las empresas invierten, pero lo indispensable para que el sistema siga funcionando al borde del precipicio. Y el Estado regula, pero menos de lo que debiera. Este modelo eléctrico del modo que está diseñado no brindará respuestas a esa demanda creciente ni a los cambios en la pauta de consumo de la población. El debate sobre el nivel de las tarifas es importante, aunque ya se han autorizado ajustes para este año además de haberse entregado compensaciones en el anterior. Pero no es la cuestión central en la definición de un esquema energético previsible y seguro. El actual se presenta con inversiones insuficientes, descoordinación operativa, ausencia de planificación, deficiente control estatal y sobrecostos operativos.
En ese crítico panorama queda como fuera de tono la pretensión de prever el sendero futuro de la demanda y adelantarse con obras. Por el contrario, el camino que se transita consiste en exprimir al tope las instalaciones y sólo actuar cuando los equipos y cables se rompen, como cuando saltan los tapones en el hogar.
En su momento, el Estado invirtió para construir las redes eléctricas y las gasíferas pensando en la expansión del consumo y en el crecimiento de la economía. Destinó millonarios recursos sin el criterio de rentabilidad empresaria y sí de rentabilidad social. Gran parte de esas redes son las que aún hoy son las bases del sistema energético nacional y que permiten abastecer a la actual demanda.
En esa instancia aparece con claridad la distinta función que cumple el Estado y el sector privado cuando se trata de brindar un servicio público esencial para la población. Y, por lo tanto, los efectos negativos para los consumidores cuando el Estado abandona esa tarea indelegable, lo que no implica el desplazamiento total del sector privado como operador del servicio. De todos modos, incluso en este modelo, el Estado debe asumir con más autoridad el estilo de organización del consumo energético de la población." ALFREDO ZAIAT, Suplemento "Cash", Diario Página 12 (06/01/2008)

¿Quién nos cambia las lamparitas?

Iniciativas como las que se llevan a cabo por estos días, el cambio de las lamparitas de los domicilios por artefactos de bajo consumo ya se llevó adelante en Venezuela y Cuba. Consultado por algunos medios, he comentado que esta medida estaba siendo adoptada en esos países. Sin embargo eso no es suficiente para desarrollar un plan que nos conduzca al uso eficiente del recurso. Los habitantes de Venezuela y Cuba tienen un concepto diferente al nuestro. Para ellos, la energía es un bien social, no un commodity, ni una mercancía.
En los países que menciono, la energía es un patrimonio nacional. Las empresas no están privatizadas. El recurso natural no está en manos privadas y quienes dominan el mercado no son precisamente los oligopolios internacionales. Como el cambio de los artefactos de cada casa es parte de un concepto y de una base ideológica absolutamente diferente, los resultados también son absolutamente diferentes.
En Argentina, se pone en marcha un plan en un esquema totalmente distinto. Es decir, querer cambiar las lamparitas no está mal pero lo que sí está mal es el agente encargado de hacerlo. Fíjense ustedes que quien va a llevar la iniciativa adelante en esta ciudad es la empresa multinacional "que garantiza la distribución" (lo que en rigor no es así) en la región de Mar del Plata. Es decir, EDEA SA va a entregar dos lamparitas por usuario como una manera de producir conciencia.
Lo va a hacer una empresa que actúa con impunidad, lo va a hacer una empresa que avasalla los derechos de los usuarios, lo va a hacer una empresa que avasalla los derechos de los trabajadores, lo va a hacer una empresa a la que lo único que le interesa es la rentabilidad y para nada el desarrollo de un servicio a largos años tratando de garantizarle la continuidad y la seguridad al usuario.
¿En esta empresa confía nuestro gobierno? ¿En una empresa que cobra una Tarifa Estacional, lo que constituye un contrasentido a cualquier política de ahorro y eficiencia? Esta Tarifa Estacional es inconstitucional porque obliga al usuario a consumir, caso contrario, el usuario tiene que pagar simplemente por canon fijo 25 pesos (sin contar los impuestos), sin derecho a hacer uso del servicio. ¿De qué política hablamos entonces de ahorro cuando no modificamos una cuestión de fondo como esta?


* Secretario General del Sindicato Luz y Fuerza Mar del Plata, Secretario General de la FeTERA y Secretario de Organización de la CTA

COMIENZA LA FIESTA DE LOS PESCADORES... ¿QUÉ SE FESTEJA?

Mientras se prepara el inicio de una nueva edición de la Fiesta de los Pescadores, los trabajadores del puerto realizaron una nueva movilización por las calles de esa zona de la ciudad. "El pasado viernes nos movilizamos hacia la sede local del Ministerio de Trabajo de la Nación para ver si el delegado Angel Ratto nos podía atender. Esto no fue posible y de allí fuimos hasta la municipalidad para intentar hablar con el intendente Gustavo Pulti. Ahí nos dijeron que Pulti estaba reunido con el gobernador Daniel Scioli en el Hotel Hermitage. Una persona cercana al intendente se comunicó y nos dijeron que el gobernador nos atendería. Y así fuimos hasta el Hotel y nos atendió Scioli", manifestó la trabajadora del puerto Norma Gamarra, quien agregó que el mandatario bonaerense "prometió ponerse a la cabeza del tema del conflicto en el puerto marplatense".

Es preciso recordar que los trabajadores vienen reclamando desde hace tiempo por la registración laboral en el marco del convenio colectivo de 1975. Luego de varias reuniones con el Ministro de Trabajo de la Nación, Carlos Tomada, éste prometió aceitar los mecanismos para que esto fuera posible pero aún no ha habido grandes novedades en ese sentido. También se había acordado la llegada de un subsidio para paliar la situación de los trabajadores y la posibilidad de que el Ministro mediara en la situación de los trabajadores despedidos. Sin embargo, según lo manifestado por los referentes portuarios esos subsidios sólo llegaron para un grupo minoritario y los obreros despedidos tampoco fueron reincorporados. "Nosotros no queremos vivir de un subsidio y una bolsa de comida -continuó Gamarra-, pero sabemos que son muchos los compañeros que lo necesitan. En algún momento dijimos que no iba a haber temporada en Mar del Plata si no se atendía nuestro reclamo. Hoy se inaugura la Fiesta de los Pescadores y estamos tratando de llamar la atención de esta gente para que nos vuelva a recibir. Queremos que aquellos que firmaron un papel y se comprometieron a cumplir con algo, lo hagan".

DISTRIBUCIÓN DE ALIMENTOS, CON TARJETA

El gobierno bonaerense anunció para el mes de febrero la implementación de un sistema de tarjetas del Banco Provincia para la distribución de alimentos entre personas de bajos recursos. Según lo explicado por el Ministro de Desarrollo Humano de la Provincia, Daniel Arroyo, dicho sistema apunta a evitar el clientelismo. Arroyo explicó que "lo que queremos es un mecanismo en donde los planes sociales se vayan reemplazando
paulatinamente por trabajo, producción y posibilidades de mejoras alimentarias".

En Mar del Plata, la Secretaria de Desarrollo Social, María del Carmen Viñas, manifestó en diálogo con FM de la Azotea, que "este sistema nos parece bien. Ya hemos tenido algunas reuniones con las asistentes sociales. Lo que necesitamos desde el ámbito municipal tanto para el Plan Más Vida como para el Plan Alimentario es tener un padrón muy claro de los beneficiarios". Y agregó que "en el caso del Plan Más Vida (que es provincial) la implemwentación se hará en conjunto entre la Provincia y el Municipio". Mediante este plan, el gobierno bonaerense distribuye a través de las "manzaneras" alimentos a unas 35.000 familias en el Partido de General Pueyrredón.Finalmente, Viñas sostuvo que desde el gobierno municipal "estamos decididos a cambiar el sistema
porque nos parece que es mucho más digno para las familias que hoy tienen un problema de
trabajo".

FUERON INTERNADAS DE URGENCIA DOS PERIODISTAS DE CANAL 9

Se encontraban "retenidos", por orden del empresario estadounidense-mexicano Remigio Angel González, en un lugar del Canal donde no tenían, agua, baños, luz, comida, al tiempo que se los filmaba e intimidaban psicológicamente. Los trabajadores, junto con la UTPBA, ya llevaban 48 de hacinamiento en su lucha por ser reincorporados a sus puestos de trabajo.

Por la Comisión Directiva de la UTPBA

Rebanadas de Realidad - UTPBA-Buenos Aires, 09/01/08.- Las periodistas Verónica Lázaro y Carina Alvarez fueron internadas de urgencia ayer, a primeras horas de la tarde, al sufrir (ambas) una fuerte descompensación producto del hacinamiento al que fueron sometidasjunto a sus colegas despedidos, delegados e integrantes de la UTPBA, por parte de los actuales licenciatarios de Canal 9.
Los periodistas y la UTPBA se encontraban en plena lucha por la reincorporación inmediata de los trabajadores de prensa despedidos a sus puestos de trabajo.
En tanto, el Ministerio de Trabajo no adoptó ningún tipo de medida ante las constantes denuncias realizadas por los comunicadores y su Organización.
Horas antes otros de los colegas debió ser internado de urgencia en el Hospital Fernández, dado que todos ellos, sufrieron del encierro al que el empresario, Remigio Angel González, indicó que se los sometiera.
La medida salvaje consistió en dejarlos sin agua, sin baños, sin comida, sin refrigeración, mientras personal de seguridad los intimaba permanentemente a abandonar la lucha.
La acción emprendida por el grupo empresarial es típica de las realizadas durante la dictadura militar.
Incertidumbre
Al emitirse este comunicado, la periodista Verónica Lázaro se encontraba internada en el Hospital Fernàndez, acompañada por el prosecretario gremial de la UTPBA, Edgardo Miranda; y Carina Alvarez, estaba teniendo las primeras atenciones en el Centro Médico de la UTPBA, junto al Secretario General de la entidad, Daniel das Neves.
La UTPBA viene realizando permanentemente denuncias de la grave situación que atraviesan los periodistas despedidos de Canal 9 y los problemas de salud que comenzaban a tener -por el encierro-ante el Ministerio de Trabajo y la opinión pública, insistiendo en señalar la impunidad con la que se maneja este grupo mediático, reiterando su exigencia de que se preserve la fuente de trabajo de cada uno de los periodistas del Canal.
La cartera laboral no adoptó ningún tipo de medida para conservar el trabajo de los compañeros.
"Lo sucedido en Canal 9 es de un salvajismo inadmisible y los periodistas-comunicadores sociales sabremos darle respuestas contundentes a hechos como el producido por la patronal del Canal 9", afirmó Edgardo Miranda.
Los periodistas despedidos, sus delegados y los representantes de la Rama televisión, junto a la UTPBA llaman a los colegas difundir este hecho inhumano por todos los medios.