TINTA HOY, RESISTIO MAS QUE NUNCA

Cuando la policía y el oficial de justicia llegaron, ya hacía mucho que trabajadores, artistas, habitantes del Centro Social y Cultural Tinta Roja, vecinos del barrio Villa Primera, y referentes culturales, políticos y sociales de otras zonas de la ciudad estaban haciendo el aguante.
Estaban las gomas preparadas para encenderse, y el histórico impulsor del proyecto encadenado a las puertas de la abandonada iglesia evangélica. Pero no hizo falta más que la presencia y la actitud. Incluso ante el micrófono de FM De la Azotea, el oficial de Justicia solo dijo que “no están dadas las condiciones, deponemos la orden de desalojo, no sabemos hasta cuándo”.
HB Ruedas había alcanzado a decir que resistirían lo que fuera necesario, para mantener abierto un espacio como el que no hay otro en la zona, y que estaría vacío y cerrado, sino fuera por ellos. “Lo que quieren es plata, porque este lugar estuvo sin uso muchos años, y ahora que le dimos vida, lo reclaman. No vinieron a dialogar, tuvimos siempre la actitud de dialogar, pero ellos directamente llamaron a la policía”, agregó antes de pedir a todos los que puedan, que “ahora más que nunca hay que venir a Tinta, a ayudar a que siga abierto”.
Alrededor suyo decenas de artistas, músicos, murgueros, y militantes de distintos sectores de la ciudad, acompañaron hasta el medio día a quienes llevan adelante este centro Social y cultural. Y coincidieron en que aún falta dar el paso adelante, “que le toca a las autoridades para que se defina que a este centro no hay que tocarlo”. Es cierto que, pese a las convocatorias realizadas, ninguna autoridad cultural estuvo presente esta mañana, y también que no puede ser que permanentemente tengan que estar organizando la resistencia a un posible desalojo, en vez de poder desarrollar la actividad para la que el lugar está abierto y es sostenido con tanto esfuerzo.
Un centro que, adoptó desde hace un tiempo algo que es más que una frase, y se transformó en un escudo ahora: TINTA, RESISTE Y EXISTE!

Audio HB RUEDAS

JOSE HERNANDEZ, BARRIO BORRADO

No lo tome a juego. Busque un mapa de la ciudad, busque el nombre de este barrio. ¿Nada? Intente seguir el recorrido de la calle 224, más allá de Carlos Gardel, a la altura de Magallanes, Ayolas, y hasta 238…
El barrio no está trazado. No está en el mapa. No tiene la subdivisión de las calles. Pero no es que no existe. Aunque algunos funcionarios preferirían que así fuera. Y en lo concreto, actúan como si no existiera.
Si los vecinos reclaman por el estado de las calles, si reclaman por el transporte, que los deja a 11 cuadras, por el agua, que llega a cuatro, o las cloacas que están a 5, o el gas que está un poco más lejos; la respuesta es siempre la misma: ‘qué barrio?, no ahí no puede haber nada, es zona inundable, por eso no hacemos la traza de las calles, ni podemos dar agua corriente, ni alumbrado, ni, ni, ni…’
Hace 18 años que ahí vive gente beneficiada con la donación de los terrenos por su antiguo propietario, que ocuparon unas 90 casas provistas por un plan provincial, avalado para instalarse allí con una ordenanza municipal de 1992. Sí, “la municipalidad nos puso acá donde estamos, y en 1999 un arquitecto que era concejal, nos dijo que tendríamos que hacerle juicio a la municipalidad por darnos este lugar, porque es inundable. ¿Qué hacemos le hacemos juicio, ahora ese concejal es intendente, y nos niega que existamos”, dijo tan claramente Clotilde Piruzanto, que para qué agregar nada. Es vecina del lugar y titular de la Sociedad de Fomento. En un barrio sin escuela, sin plaza, sin sala de salud, sin alumbrado, sin agua, sin cloacas, sin gas, sin calles transversales. ¿Y la basura? “La juntan un par de veces por semana”, dice sonriendo Clotilde. Eso sí hay unas cien casa en diez manzanas, con miles de vecinos que dicen que viven allí desde hace más de 15 años. Gente que trabaja en la pesca y en el puerto, en cosechas de la zona, que no trabajan, otros que intentan ir a estudiar. “La escuela no está lejos, hay una a 15 cuadras y otra a 20, caminamos”. Claro. Porque tomarse el colectivo también hay que caminar esas cuadras, entonces están acostumbrados a que esas distancias sean cortas.
“Les pedimos a los funcionarios que nos atiendan, que dejen de negar que existimos, que entiendan que acá hay gente viviendo que necesita estros servicios para vivir dignamente”, expresó una luchadora Clotilde, a la espera todavía de un cartógrafo a la derecha.

Audios Clotilde Piruzanto

NILDA ELOY VOLVIO A EXIGIR JUSTICIA YA

“Estamos todos igual, esperando”, expresó a través de FM De la Azotea, Nilda Eloy, compañera de militancia de Jorge Julio López, desaparecido hace 9 meses, luego de declarar contra Miguel Etchecolatz.
La espera está referida a la falta de resultados en la investigación, en la que la semana pasada se produjo un allanamiento a la cárcel Marcos Paz, sitio en el que Etchecolatz cumple su condena por genocidio.
“Se sabe que aparecieron líneas telefónicas, pero no se encontraron computadoras, cuando es sabido que este hombre ha estado chateando. Tampoco aparatos telefónicos, ni celulares, que se sabe que los tienen. Sí hemos sabido que hay pruebas de conexiones con militares retirados y en ejercicio”, amplió Eloy. Si bien no quiso profundizar en ese aspecto “porque estamos realmente interesados en la investigación, y queremos que se avance y no entorpecer”, sí dijo que esa es una línea que es indispensable profundizar.
Al respecto de las carpetas con recortes encontradas en la anterior requisa, realizada el 23 de marzo aclaró que “no nos sorprende que encuentren eso. Cualquiera que es investigado por algo, sigue ese tema desde la prensa. Sí hay que decir que esa requisa fue una fantochada, un cachetazo, porque la hicieron ese día, que no es cualquier día, y porque aparentemente les avisaron 48 antes que iban a ir. Así qué van a encontrar”. Y luego de eso, destacó que, “gracias a la presión realizada por nuestra organización Memoria Ya, logramos que las autoridades del penal, admitieran que tenían los cuadernos de visitas, y no un listado que nos habían dado antes, cuando nos negaron el registro completo”.
Mientras se hacía la entrevista, se especulaba con el hallazgo de un cuerpo en una cantera de Ringuelet, en las afueras de La Plata. Pero terminada la autopsia se puede confirmar que no pertenece a Jorge Julio López, ya que se estableció que sería un hombre de entre 55 y 65 años y que los resultados de las pericias odontólogicas "descartaron que pueda tratarse de Jorge Julio López", según publica esta tarde la versión digital del diario El Día, de la capital Provincial.

Audios Nilda Eloy