Las elecciones legislativas del 28 de junio están a la vuelta de la esquina y si bien se habla de candidaturas, armados y lugares en las listas, poco es el debate acerca de los grandes temas que deberían tratarse. Pino Solanas fue candidato a presidente en el 2007 y será nuevamente candidato a legislador por la Capital Federal representando a Proyecto Sur. Sobre la pobreza del debate y sobre otros temas habló con FM de la Azotea. “Falta de todo en esta campaña. A mi me llaman una vez cada dos meses para hablar sobre la campaña en los grandes medios. A nosotros nos sobran ideas, hemos recorrido el país. Cuando uno hace películas sobre el país, lo recorre y habla con especialistas y la gente del lugar. Pero los grandes temas no se hablan. Solo se habla de candidaturas, lugares en las listas, armados. Eso nos parece que forma parte de lo viejo. Nosotros tenemos un proyecto porque queremos gobernar la Argentina, hay que realizar este país de una vez por todas. Todos nos hemos ganado la vida en nuestra profesión, no necesitamos ir a la política para ganarnos la vida. Yo tengo una gran vinculación con la gente joven y esa gente se ha alejado de la política ante tanto manoseo y falta de ideas. Hay que reconstruir la política como una ética”, comenzó diciendo el cineasta.
Y siguiendo con el tema electoral agregó, reconociendo que la correlación de fuerzas mediáticas no lo favorece, que “lo que necesitamos es que nuestro mensaje llegue el conjunto del país. Los grandes espacios están ocupados. Hay un señor que hace tres, cuatro años, nadie lo conocía y ahora hace campaña por que tiene mucha plata y dice es mía, mía, mía. ¿A qué no saben quien es? De Narváez es un invento de la plata. El banquero Heller es el nuevo candidato del kirchnerismo. Ocupan todos los espacios. Proyecto Sur tiene propuestas y no está habitado por profesionales de la política sino por profesionales de distintos ámbitos que hemos venido estudiando los distintos problemas. Proponemos un cambio posible, en paz y en democracia. Por eso decimos más democracia. No hace falta mano dura. Otros dicen pena de muerte. No, esto es terrible. Todavía estamos viviendo las trágicas consecuencias de lo que fue el libertinaje de los años noventa. Empobrecieron como nunca la Argentina e hicieron nacer un ejército de verdaderos misiles. Pobres pibes de quince o veinte años que no tenían trabajo ni podían capacitarse ni estudiar y encima les vendían droga en las esquinas. Los convirtieron en misiles.”
El realizador de películas como La hora de los hornos y Memoria del saqueo, entre otras, también se refirió al actual gobierno. Y aunque reconoció algunos aspectos positivos como “avanzar en derechos humanos y en la integración del MERCOSUR y América Latina o estatizar las AFJP que fue un negociado inmundo”, también resaltó que “los Kirchner siguen manteniendo el saqueo en petróleo y minería, que significa tanta renta y dinero como todo lo que da el campo. No puede ser que un país al que le sobra riqueza, que puede alimentar a 400 millones de habitantes y que exporta riquezas todo el tiempo, tenga cuatro millones de indigentes, lo que significa el diez por ciento de la población. Y hay 13 millones de pobres. Esto es una inmoralidad. Se regalan el petróleo y la minería sin control público, sin ningún medidor que sepa cuanto petróleo se llevan de los pozos. La justicia tiene que intervenir y procesar a los funcionarios que permiten esto.” Por otra parte, propuso “acabar en pocos meses con la indigencia nacionalizando el petróleo y el gas. Esa es una renta que alcanza los 20.000 millones de dólares anuales y si se recupera también la gran minería se supera largamente esa cifra. America Latina y todos los grandes países del mundo lo han recuperado. Hoy el noventa por ciento de las explotaciones petroleras está en manos de empresas estatales o son fuertes asociaciones entre estatales y privadas.”
Otro tema que Solanas consideró primordial es la reforma de la ley de radiodifusión. “En los años noventa siendo diputado nacional presenté tres proyectos de reforma. Yo apoyo plenamente el proceso iniciado con los 21 puntos (presentados por la Coalición por una Radiodifusión Democrática) que son altamente positivos”. En cuanto al anteproyecto de Ley de Servicios Audiovisuales presentado por la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner, confesó que “todavía no lo he leído pero he escuchado varias veces a Mariotto (titular del COMFER) con proposiciones atinadas. Habrá que bajar la letra chica. Nosotros participaremos positivamente en ese debate tratando de que salga la mejor ley. Las frecuencias son del pueblo. Se concesionan a privados, que deben cumplir los lineamientos y preceptos de la ley marco que es lo que tiene que discutirse. No puede ser que los multimedios consideren que son derechos adquiridos. La ley debe asegurar los derechos constitucionales del ciudadano de gozar de la mejor información, pluralista, oportuna y objetiva. Y eso no se cumple. En 1996 en Europa se garantizó la pluralidad, acá no es así. Acá el periodista se convierte en un empresario y hace un programa para conseguir avisos. La clave también será la conformación del nuevo ente regulador que reemplace al COMFER para garantizar la pluralidad y ecuanimidad.”
Por último el realizador cinematográfico se refirió al rol de las organizaciones sociales y destacó que “Proyecto SUR es un Movimiento emancipador, político, social y cultural. No es un partido sino un movimiento, de contenidos emancipadores. Y cuenta con una vinculación permanente con referentes sociales y territoriales. Yo soy fundador del MORENO (Movimiento por la recuperación de la energía), junto con el queridísimo José Rigane, histórico dirigente de la FETERA (Federación de Trabajadores de la Energía) y la CTA (Central de los Trabajadores Argentinos) y junto con Felix Herrera y Gustavo Calleja. Sin un gran movimiento social y sin el sostén de las organizaciones sociales y populares y de los trabajadores es imposible un proceso de cambio. Un proceso de cambio es algo que se pelea y se defiende todos los días con opinión y con movilización en la calle.”
Y siguiendo con el tema electoral agregó, reconociendo que la correlación de fuerzas mediáticas no lo favorece, que “lo que necesitamos es que nuestro mensaje llegue el conjunto del país. Los grandes espacios están ocupados. Hay un señor que hace tres, cuatro años, nadie lo conocía y ahora hace campaña por que tiene mucha plata y dice es mía, mía, mía. ¿A qué no saben quien es? De Narváez es un invento de la plata. El banquero Heller es el nuevo candidato del kirchnerismo. Ocupan todos los espacios. Proyecto Sur tiene propuestas y no está habitado por profesionales de la política sino por profesionales de distintos ámbitos que hemos venido estudiando los distintos problemas. Proponemos un cambio posible, en paz y en democracia. Por eso decimos más democracia. No hace falta mano dura. Otros dicen pena de muerte. No, esto es terrible. Todavía estamos viviendo las trágicas consecuencias de lo que fue el libertinaje de los años noventa. Empobrecieron como nunca la Argentina e hicieron nacer un ejército de verdaderos misiles. Pobres pibes de quince o veinte años que no tenían trabajo ni podían capacitarse ni estudiar y encima les vendían droga en las esquinas. Los convirtieron en misiles.”
El realizador de películas como La hora de los hornos y Memoria del saqueo, entre otras, también se refirió al actual gobierno. Y aunque reconoció algunos aspectos positivos como “avanzar en derechos humanos y en la integración del MERCOSUR y América Latina o estatizar las AFJP que fue un negociado inmundo”, también resaltó que “los Kirchner siguen manteniendo el saqueo en petróleo y minería, que significa tanta renta y dinero como todo lo que da el campo. No puede ser que un país al que le sobra riqueza, que puede alimentar a 400 millones de habitantes y que exporta riquezas todo el tiempo, tenga cuatro millones de indigentes, lo que significa el diez por ciento de la población. Y hay 13 millones de pobres. Esto es una inmoralidad. Se regalan el petróleo y la minería sin control público, sin ningún medidor que sepa cuanto petróleo se llevan de los pozos. La justicia tiene que intervenir y procesar a los funcionarios que permiten esto.” Por otra parte, propuso “acabar en pocos meses con la indigencia nacionalizando el petróleo y el gas. Esa es una renta que alcanza los 20.000 millones de dólares anuales y si se recupera también la gran minería se supera largamente esa cifra. America Latina y todos los grandes países del mundo lo han recuperado. Hoy el noventa por ciento de las explotaciones petroleras está en manos de empresas estatales o son fuertes asociaciones entre estatales y privadas.”
Otro tema que Solanas consideró primordial es la reforma de la ley de radiodifusión. “En los años noventa siendo diputado nacional presenté tres proyectos de reforma. Yo apoyo plenamente el proceso iniciado con los 21 puntos (presentados por la Coalición por una Radiodifusión Democrática) que son altamente positivos”. En cuanto al anteproyecto de Ley de Servicios Audiovisuales presentado por la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner, confesó que “todavía no lo he leído pero he escuchado varias veces a Mariotto (titular del COMFER) con proposiciones atinadas. Habrá que bajar la letra chica. Nosotros participaremos positivamente en ese debate tratando de que salga la mejor ley. Las frecuencias son del pueblo. Se concesionan a privados, que deben cumplir los lineamientos y preceptos de la ley marco que es lo que tiene que discutirse. No puede ser que los multimedios consideren que son derechos adquiridos. La ley debe asegurar los derechos constitucionales del ciudadano de gozar de la mejor información, pluralista, oportuna y objetiva. Y eso no se cumple. En 1996 en Europa se garantizó la pluralidad, acá no es así. Acá el periodista se convierte en un empresario y hace un programa para conseguir avisos. La clave también será la conformación del nuevo ente regulador que reemplace al COMFER para garantizar la pluralidad y ecuanimidad.”
Por último el realizador cinematográfico se refirió al rol de las organizaciones sociales y destacó que “Proyecto SUR es un Movimiento emancipador, político, social y cultural. No es un partido sino un movimiento, de contenidos emancipadores. Y cuenta con una vinculación permanente con referentes sociales y territoriales. Yo soy fundador del MORENO (Movimiento por la recuperación de la energía), junto con el queridísimo José Rigane, histórico dirigente de la FETERA (Federación de Trabajadores de la Energía) y la CTA (Central de los Trabajadores Argentinos) y junto con Felix Herrera y Gustavo Calleja. Sin un gran movimiento social y sin el sostén de las organizaciones sociales y populares y de los trabajadores es imposible un proceso de cambio. Un proceso de cambio es algo que se pelea y se defiende todos los días con opinión y con movilización en la calle.”