Al cumplirse el primer aniversario de la desaparición de uno de los principales testigos en el juicio que permitió la condena de Miguel Etchecolatz, Jorge Julio Lopez, el juez Falcone no dudó el calificar el hecho como “un estigma para la política de Derechos Humanos que queremos llevar adelante”.
El magistrado aseguró que se trata de un acto “bien organizado con lo cual se pretendió intimidar a decenas de testigos que tienen mucha información por aportar” y que “hechos de este tipo nos retrotraen 30 años”.
Ante la falta de explicación del caso el principal responsable del Juicio por la Verdad en Mar del Plata, consideró que es necesario que el Gobierno Nacional “comprometa todos los esfuerzos y todos los medios a su alcance” en la investigación.
“Si la investigación de los actos de terrorismo de estado es una política de derechos humanos, el gobierno central tiene que poner toda la energía y los funcionarios necesarios para esclarecer el hecho, de lo contrario va a significar un retroceso y un golpe al estado de derecho democrático”, concluyó.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario